El primer día en un trabajo nuevo siempre viene acompañado de una mezcla de nerviosismo y emoción: rellenar documentación, empezar la capacitación, conocer a los compañeros y hacerse una idea de cómo será la vida en el futuro inmediato. Lo último que esperas es que tu primer día sea también el último, pero es más común de lo que crees. En un hilo de Reddit, gente de todo el mundo compartió sus experiencias más locas del primer día que, al final, hicieron que no hubiera un segundo día. Desde anuncios engañosos hasta gerentes sospechosos, hemos seleccionado algunas de las mejores historias de personas reales que renunciaron a su trabajo el primer día.

Un ritual matutino
Algunos empiezan el día tomando un café y viendo las noticias; otros, corriendo y escuchando un podcast. En esta empresa, sin embargo, han decidido que todos deben pasar las mañanas juntos haciendo la misma rutina. Y si fuiste a una escuela primaria privada y religiosa, puede que esto te resulte familiar…

Así es; en esta empresa, obligaban a todos los empleados a rezar juntos y a recitar el juramento de lealtad todas las mañanas. Hemos oído hablar de los desayunos de equipo o de las reuniones matutinas para reunir a todo el equipo por la mañana, pero esto es poco ortodoxo. Por suerte, esta persona volvió a casa de ese primer y último día a estar con lo único a lo que sí le juraría lealtad: Bisco.