¡Adiós, vecino!
Siempre es más espeluznante cuando un niño da una descripción inquietante y detallada de una figura fantasmal que nadie más puede ver. ¿De dónde demonios sacan esas descripciones? Nunca lo sabremos, pero no nos gusta. La imaginación hiperactiva de este niño conjuró un fantasma de departamento muy espeluznante pero amistoso que vivía con él y su familia.
El fantasma era, en sus palabras, una “mujer muerta de piel azul, sin pelo y ojos negros”. Qué tierno, ¿verdad? Esta terrorífica criatura vivía en el departamento y a veces intentaba acompañarlos en los viajes en coche. Por desgracia, nunca había espacio suficiente para que entrara en el auto, aunque era un fantasma y técnicamente podía flotar encima de alguien.